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Todo lo que nos rodea puede ser una historia susceptible de formar parte de la literatura, de ser un libro publicado. Para que el escritor o novelista logre convertir su entorno, gracias a la escritura creativa, y sea capaz de convertirlo en una creación literaria, es necesario entender y desarrollar los pasos previos. Para empezar, es imprescindible leer a los clásicos de la literatura. Después es necesario ver el mundo a través del prisma de un escritor o novelista. Finalmente, es importante atender a la formación, respecto de la literatura.

 

Leer clásicos de la literatura

Crear en literatura, ya sea a través de un cuento, una novela o poesía, resulta una experiencia de gran intensidad. En los mejores casos, la experiencia puede suponer grandes dosis de satisfacción y realización personal. Pero si el escritor o la escritora no han sabido desarrollar su faceta como lectores, la experiencia puede convertirse en un rotundo fracaso.

Antes de buscar respuestas a cómo elaborar un buen cuento, a cómo hacer una narración o a cómo publicar un libro, todo escritor debe ser un lector. Pero no lector de recetas de comida o de manuales de funcionamiento, sino un verdadero lector de obras clásicas de la literatura.

Los clásicos de la literatura pueden aportar tanta o más formación que un taller literario, ya que de las propias características de la literatura clásica pueden extraerse modelos, técnicas y estilos de creación literaria.


¿Por qué leer literatura clásica?

Porque en el mundo de la literatura no existe la fecha de caducidad, lo que significa que sigue siendo importante lo que escribieron las escritoras y los escritores clásicos y más aún, las técnicas literarias que utilizaron entonces, para escribir.

Las obras literarias escritas y publicadas hace cientos de años suponen una fuente incomparable de información y formación. Su contenido puede estar tan vigente como el de cualquier creación propia de la literatura contemporánea. Y aún más importante, los clásicos sirven para descubrir lo que ya se ha escrito y cómo ha sido escrito, de manera que ningún escritor o poeta contemporáneo caiga en el error de repetir temas y esquemas, en literatura.

Una persona que no lea pero que se considere a sí misma escritora, puede perfectamente llegar a conclusiones similares a las que ya se llegara diez siglos atrás. Es algo más que común en literatura, pero el verdadero problema está en que esa persona puede acabar poniendo todo su esfuerzo en escribir una novela muy parecida a una que ya existe.

Para evitar duplicar esfuerzos en la creación literaria –además de evitar una acusación por plagio- leer a los clásicos de la literatura es un primer paso imprescindible para la creación literaria y la escritura creativa.

 

Ser escritor es un estilo de vida

Aunque parezca difícil de apreciar, el entorno de un escritor no necesariamente ha de ser el mismo que observan o en el que viven los demás. El novelista, el prosista y el poeta deben observar aquello que los rodea con mirada de escritor, de manera que la información que les llega pueda convertirse en literatura.

Con sólo la observación como herramienta, una persona es capaz de encontrar material suficiente para la creación literaria. El escritor es hijo de su tiempo, lo que significa que de su tiempo se nutre y es el sentir de su tiempo histórico el que transmite en sus obras literarias, incluso cuando dichas obras sean propias de la ciencia ficción.

La imaginación no es otra cosa que una combinación de lo que se ha aprendido y de lo que se ha vivido. Así que todo futuro que brota de la pluma de un escritor es un pasado visto o tratado desde otra perspectiva.

 

Formación literaria: escuela de escritores o talleres literarios

La formación literaria es el tercer paso para el aspirante a convertirse en uno, entre los grandes escritores de la historia de la literatura. En este sentido, las opciones de formación son múltiples y variadas: taller de escritura creativa para narrativa o cuento, un curso de literatura sobre recursos estilísticos y tipos de estrofas, para poesía.

Los talleres de escritura no son imprescindibles pero ciertamente suponen un salto de calidad importante en la formación literaria del futuro escritor de novela o de poesía. Como se da la circunstancia de que gran parte de esta oferta formativa conlleva un desembolso económico, es importante conocer otras formas para adquirir parte de dicha formación, de manera gratuita. 

En ese sentido, los blogs y foros literarios son un recurso interesante a tomar en cuenta. Aunque el aprendizaje es más lento que el que podría darse en un curso de escritura, leer los trabajos de otros y recibir comentarios críticos en los propios, puede contribuir a limar errores y mejorar en la creación literaria.

Aún así, es importante recordar que un buen libro sobre literatura puede resultar mejor herramienta de aprendizaje que la opinión de quienes comienzan a dar sus pasos en el mundo literario. No dejar de leer es el gran secreto para crear en literatura.

 

Créditos de la imagen: Malsicuro - Green fountain pen and ink bottle

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